He vuelto, sigo en el paro y estoy muerta tras un fin de semana en los madriles.
Porque no, no estaba muerta. Podía parecerlo porque no me prodigo por estos lares, pero sigo viva y coleando, buscando trabajo infructuosamente y disfrutando de la vida, que es lo mejor que se puede hacer cuando se trabaja en la mayor empresa del país.
Estaba pensando en ponerme a contar el viaje a Madrid, pero creo que aparecerá en muchos blogs de los que tengo enlazados y me cuesta competir con las blogueras que tan bien lo exponen, así que... Lo único que decir porque no lo compartí con ellas es que... ya me quité el mono de desayunar porras con café y de comer japonés como es debido.
Ahora estoy rucando en qué ocupar mi tiempo libre, estoy sacándome el carnet de conducir de una buena vez y maquinando la idea para un cuento, relato... (lo que me dé la mente). Porque hace ya mucho tiempo, me dedicaba a escribir lo que me pasaba por la cabeza y la verdad es que me servía de distracción y me decían que no lo hacía mal, así que estoy pensando en abrir un apartado de paranoias mentales de las mias sólo para lucimiento personal y espero que vuestro disfrute. Pero no garantizo nada, puede que todo se quede en una idea que no se haga realidad.
En fin, que me lo he pasado muy bien, que he conocido gente nueva y que espero volver muy pronto para tomarme algo con las madrileñas (que cada día me gustan más)
A ver si para el próximo post no tiene que pasar más de un mes de nuevo.