martes, 10 de febrero de 2009

Que guapo ye querese...

Sí, terminad la frase. ...pa luego dir y jodese.

Hoy no tengo el día reivindicativo, hoy no tengo ganas de comentar las noticias del periódico, a pesar de que sigue habiendo algunas que no tienen desperdicio.
Hoy he recibido por fin los certificados de la empresa. Mira que curré para conseguirlos y, contra todo pronóstico, lo hice. Así que aprovechando que tenía a mi compi por aquí nos hemos dedicado a colgarlos en la pared, que tienen el detalle de mandarlos enmarcados y todo. Cosa que no me extraña teniendo en cuenta la pasta que te levantan los señores certificadores.

Bueno, pues como me siento muy orgullosa de estos cuadrinos que cuelgan ya de la pared, decidí tomarme parte de la mañana de relax y me dediqué a navegar por los blogs del mundo. Empecé por el de Josu y de ahí en adelante fui enlazando unos con otros. Todos de mujeres, todos buenísimos, todos hablando de ellas, de lo que les pasa, de lo que quieren, de lo que echan de menos.

Debo de ser una cotilla redomada pero me encanta leer lo que las demás escriben. realmente es conocer un poco a quien no se conoce nada, ese poco que quieren mostrar al público en general amparadas por el anonimato que da la red.

Yo no suelo hablar mucho de mí. Así que hoy voy a hacerlo. Porque quiero, me apetece y me da la gana. Vamos, porque yo lo valgo.

Hace timepo que estoy enamorada. Que bonito, que bonitooooooo. Y la cosa marcha bien, siempre condicionada por esos altibajos que me llevan del cielo al infierno en cero coma. Realmente creo que soy bipolar, tendré que hacérmelo mirar.

Cuando estoy ahí arriba, en la cresta de la ola, esquivo los problemas, encuentro soluciones a todo y me río por cualquier cosa. Pero... ay de mi cuando la cosa no es así. Entonces distancia, espacio, asco negro y otras lindezas que no voy a detallar aquí porque... qué quereis que os diga, no tenemos suficiente confianza.

Si que hay una historia que empezaré hoy y que tuvo lugar hace muchos años en el Madrid de mis amores y mis desamores. Una historia que habla de una neña de dieciocho recién cumplidos y de los primeros besos a unos labios que sabían a carmín. Su nombre no es importante para vosotras así que la llamaré Margot, como a la gata de una amiga.

Andaba yo por aquellos entonces liada con un chaval estupendo con el que salía los fines de semana y entraba los domingos de madrugada con el tiempo justo de dormir unas horas y volver a clase. Que estupenda era la época de estudiante.
Bisexuales, heteros, gays, lesbianas, drags en enormes plataformas,... ese era mi ambiente sábado tras sábado y cuando un pedazo maromo, de los que te hacen darte la vuelta en la calle, agarró por la cadera a mi chaval supe que se nos habían acabado las noches de spaguettis y películas de Errol Flinn. Pasamos del sexo sin amor pero con cariño a los cotilleos acerca de unas y otros, de quien andaba por quien y de que uno se liaba con que otro. Que quereis, éramos adolescentes o post-adolescentes, pero niñatos al fin y al cabo. (Lo que me sorprende es que con el paso de los años esos comentarios siguen siendo el tema central de conversación de muchas y muchos ya bastante más creciditos)

Pero a lo que iba, que en una de esas noches madrileñas de alcohol y juergas me encontré a mi misma besando a la mujer que tenía a la derecha del círculo del amor. Estúpido juego muy semejante a la botella famosa donde una mente retorcida decide quien besa a quien, como y por cuanto tiempo. Ya os explicaré las reglas otro día si quereis jugar una tarde de lluvia o una noche de fiesta.

No os voy a mentir, no saltaron chispas, no descubrí el fin último de mi vida, no me enamoré, no me nada. Fue un beso, me gustó pero los había vivido mejores.

Margot acababa de entrar en mi vida por una puerta que nadie había utilizado antes. Y de aquella no había móviles, no tenía dirección de e-mail y vivía en casa de mi mamá, así que, al volver a casa en el buho, mi ex-chaval me dio un papelito con el teléfono de Margot. Sonrió y me dijo: La has cazado pequeña.

Lo guardé en el bolsillo de los vaqueros y me fui a casa...

Prometo seguir si os resulta interesante. Pero no hoy.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

apuesto...a que los vaqueros e fueron a la lavadora con el papelito en el bolsillo...quiero más!besin

Amparo dijo...

Hola Nefer, te he escrito un correo y me ha llegado devuelto... te pongo algo aqui de lo que te decía:

Me pongo en contacto contigo porque he visto tu página y veo que tienes enlaces a varios sitios de temática gay.

Pues bien, quiero informarte que universogay.com lleva año y medio funcionando y somos el segundo portal gay de españa y seguimos creciendo.

Te invito a que entres a www.universogay.com y compruebes la calidad del portal y toda la información que se da. Hay varias noticias diarias, tenemos buenos colaboradores, escritores, artistas, un bufete de psicólogos gratuito donde se pueden enviar las preguntas que nos preocupen, abogado para enviar consultas del tema, todo esto gratuito para el usuario de universogay.com.

No he querido molestar a nadie, así que pido disculpas si lo he hecho.

Dejo el correo para que te pongas en contacto: info@universogay.com

Un saludo.